Gano 2 a 1 al Quindio y sube a la Maxima categoria.
América de Cali le hizo caso a su historia, a la lógica y al fútbol. Ganó ante Quindío 2 – 1 de local y consiguió ascender a la máxima categoría del fútbol colombiano. Por fin se terminó la maldición de 5 años en la B y el América puede volver a competir con los grandes, por las grandes cosas.
Desde el primer segundo, América entendió lo que la historia le estaba diciendo, lo que la gente alentaba y lo que el mundo del fútbol le exigía. Salió a ganar, a lo que está acostumbrado el equipo escarlata y empezó con una ofensiva que estaba contagiada y carburizada por la vehemencia de las tribunas, que alentaban como si hoy fuera un día para cambiar la historia de los ‘diablos rojos’ y esa era la consigna.
Al minuto 14, avisaba América cuando el Quindío sacó el gol en la línea. Pero sólo bastaron 5 minutos más para que toda la energía y la fuerza se canalizaran en unestruéndoso grito de gol a cargo del ‘tecla’ Farías, amainando el balón con clase y definiendo arriba:
Pero en medio de la calurosa tarde valluna, todos los hinchas de América sintieron un baldado de agua fría, una tan helada que silenció el estadio y es que 5 minutos después, aún con el furor del primer gol en las pieles de los aficionados, Quindío empató gracias a un autogol del América:
Y aunque nuevamente, con ese gol, el América se quedaría en la B. apenas se cruzaba el minuto 24, había partido para rato y segundo suficientes como para retomar la alegría, la esperanza y la pasión. América no amainó su cabalgata y arremetió nuevamente contra su rival, que le quitaba el sueño de volver a la A. Se resistió el equipo de Armenia, resistía y no salía de su campo. La presión de los escarlatas era constante y perseverante. El ascenso no se les salía de la cabeza y en el 43, América consiguió un penal que celebró todo el estadio y así terminó esa jugada y de paso, el primer tiempo:
En el segundo tiempo, América tenía el reto de seguir manteniendo el ritmo. Estaban en la primera división por ahora, pero sabían que le estaban quitando la posibilidad al Quindío, así que los de Armenia saldrían con todo tras el descanso. El reto ahora era mucho más grande. Y así fue, Quindío empezó otro partido con menos tiempo pero con más ganas de fútbol y el América hizo algo que no tenía que hacer: retroceder y entregar la pelota. Ahora el partido pertenecía al equipo de Armenia.
El América ahora resistía, pero ese 2 – 1 le aseguraba un puesto en la A, nuevamente. Las ilusiones mantenían la fuerza y los ataques del equipo verde. Además, con las sustituciones de Brayan Angulo por Jonathan Álvarez, Martínez Borja por Juan Camilo Pérez y de ‘El Tecla’ Farías por Jhonny Vásquez, la estrategia era clara, defender y jugar con el balón.
Pasaban los minutos y la gente sentía más real el triunfo. Los jugadores escarlatas hacían todo para perder tiempo, simulaban faltas, demoraban los saques, caían al suelo… Faltaba poco para poner fin a una maldición y había una consigna clara: defender el gol, defender el ascenso, defender la historia.
Al final, Roldán pitó el final y América de Cali, oficialmente volvió a la A, al lugar donde le pertenece, a lo más alto del fútbol nacional.
tomado de www.colombia.com
