Con goles de Candelo, Preciado y Benedetti el cuadro azucarero venció 3-1 al equipo dirigido por Jaime de la Pava.
Mayer Candelo volvió por la puerta grande al Deportivo Cali. El mediocampista, que jugó el semestre pasado en Cortuluá, fue clave en el triunfo de su equipo 2-0 contra el onceno tulueño en el inicio del segundo semestre de la Liga. Gol y aplausos para el número 17 que estuvo claro cuando le llegó el balón, que movió al equipo mientras la gasolina le duró y fue quien abrió la senda del triunfo al minuto 43.
El estadio de Palmaseca se rindió ante los pies del caleño. Aunque en el primer tiempo no se generaron muchas opciones claras por parte de los dos equipos, fue gracias al volante que se abrió el marcador. Mayer le robó el balón en la salida a Urcos Arlenson, hizo una pared con John Pajoy y de zurda, como si estuviera solo, sin presión y como si hubiera jugado toda la vida en el gramado del estadio Palmaseca, definió al palo derecho de la portería defendida por Pablo Mina.
Fue un 1-0 que le abrió el partido al cuadro azucarero. Llegó en un momento clave. No le dio oportunidad al equipo visitante de responder. Fue un golpe anímico a favor, que le sirvió a los dirigidos por Mario Alberto Yepes para salir con mayor confianza en el segundo tiempo. Y no se demoró en hacerlo efectivo. Al minuto 55 Harold Preciado marcó el segundo gol que llenó de júbilo las tribunas que se vistieron de verde para ver el debut del equipo para el segundo campeonato.
El juego del Cali tenía feliz a sus seguidores. Dominaba, tocaba y tenía controlado al Cortuluá. Parecía que nada lo iba a perturbar, pero un tiro libre fue lo que la visita necesitó para descontar. César Hinestroza, con un cobro magistral, ubicó el balón al palo de la mano izquierda de Ernesto Hernández y al minuto 58 puso el 2-1, resultado que puso a soñar a los de Jaime de la Pava. Pero cinco minutos más tarde Juan Carabali se fue expulsado por doble cartón amarillo, lo que le hizo la vida más fácil a los locales.
Desde ahí no fueron muchas las oportunidades que generó el Tuluá. En el banco técnico, Mario Alberto Yepes se cogía la cabeza y peleaba porque quería que su equipo se fuera adelante en busca de un gol más, razón por la que decidió refrescar la mitad de la cancha. Sacó a Candelo y metió a Benedetti, quien le dio un nuevo aire a la ofensiva local. El caleño tuvo dos jugadas claves. La primera con un pase entre líneas a Preciado, quien no logró definir. Y en el último suspiro del partido con un remate de media distancia que sentenció el resultado.
Después del receso de mitad de año, en el que el cuadro azucarero se reforzó con nombres de jerarquía como los de Abel Aguilar, Aquivaldo Mosquera, Mayer Candelo, Ronnie Fernández, John Pajoy, entre otros, el equipo vallecaucano debutó en el campeonato con victoria. Su próximo encuentro será contra el Deportes Tolima el domingo 10 de julio. Elcuadro de Ibagué debutó en la Liga-II con empate sin goles contra Rionegro Águilas.
tomado de www.elespectador.com