La delegación logró 3 medallas de oro, 2 de plata y 3 de bronces, además, 22 diplomas olímpicos.
Colombia llegó a Río de Janeiro (Brasil) a cumplir la cita número 19 con los Juegos Olímpicos, a escribir una nueva historia, una rica historia, a superar los resultados que se consiguieron en las ediciones anteriores y lo ha conseguido.
No hay duda de que la figuración de la delegación en Brasil ha sido la mejor de la historia olímpica, porque nunca antes dos deportistas nacionales habían obtenido tres oros en unas mismas justas olímpicas, algo que, de tajo, raya con lo diferente.
Con los oros del pesista Óscar Figueroa en los 62 kilos, el de Catherine Ibargüen en el salto triple el país puede escribir un nuevo capítulo del libro Colombia en los Juegos Olímpicos. Figueroa e Ibargüen, paradójicamente, fueron plata en las justas de Londres hace 4 años y hoy tienen en su cuello el anhelado oro.
En Río de Janeiro se ganaron los ocho metales que se obtuvieron en 2012, pero se mejoró en los colores: tres oros, dos platas y tres bronces dicen a las claras que esta es la actuación más sobresaliente en estas justas.
En el tema de los diplomas y puntos olímpicos también la actuación de Río de Janeiro ha superado a las demás.
Colombia logrón 22 diplomas y 106 puntos. En Pekín 2008 los diplomas fueron 12 y en Londres, 16.
La actuación pudo haber sido mucho mejor, sin duda. En las huestes de la delegación colombiana hay tranquilidad por lo que se ganó, por los resultados en la tabla de preseas y en la de los diplomas y puntos olímpicos, pero hay una espinita porque el número de metales pudo ser más alto. Ibargüen cumplió, era el oro ‘fijo’, por el dominio que ha ejercido en los últimos años en el salto triple. Lo mismo pasó con Figueroa, que llegó a Río en busca de la plata y se encontró con el oro debido al retiro por lesión de la competencia del chino Lijun Chen, el gran favorito. Luis Javier Mosquera fue bronce, debido al dopaje de Izzat Artykov, en los 69 kilos de las pesas. Y qué decir de Pajón, que si su carrera fuera en línea recta, seguro, que haría lo mismo que el velocista Usain Bolt: dejaba regadas a sus rivales. El bronce de Carlos Ramírez confirmó que el BMX cumplió, entró el mismo botín de hacer 4 años.
Yuri Alvear superó lo que hizo en Londres, en los 70 kilos del judo, la vallecaucana perdió en la final y de quedó con la de plata.
Sin duda que la resurrección del boxeo fue la noticia de los Juegos para Colombia. Hace 28 años un púgil nacional no ganaba una medalla, la última vez había sido Eliécer Julio, un bronce en 1988, mientras que Clemente y Rojas y Alfonso Pérez fueron terceros en Múnich.
La plata de Yuberjen Martínez y el bronce de Valencia se convirtió en una histórica actuación del boxeo en las justas para el país, sino en el resurgir de esta actividad.
El ciclismo quedó en deuda. En la pista las opciones de ganar un metal con Fernando Gaviria en el ómnium eran gigantes, venía de ser dos veces campeón del mundo de la especialidad, un ciclo olímpico perfecto, pero quedó de cuarto.
Una caída a 10 kilómetros de la meta en la prueba de ruta dejó a Sergio Luis Henao sin medalla, en una actuación que dejó frustración. El ciclomontañismo, con el quinto lugar de Jhonnatan Botero, pagó la venida.
El botín en las pesas pudo ser mejor, pero la lesión de Francisco Mosquera antes de la competencia, lo impidió.
Las pesas hay que decir que cuentan con un grupo joven, que nombres como los de Francisco Mosquera, que se lesionó antes de la competencia y era medalla ‘fija’ en los 62 kilos, el mismo Mosquera (21 años) en 69 kg, Andrés Caicedo (19 años), sexto en 77 kilos, y Solís (26 años), pues hay futuro. Lucha obtuvo dos diplomas, la fractura del maxilar inferior y la posterior operación y recuperación dieron en los últimos tres meses al traste con la medalla de Jackeline Rentería
Arquería no cumplió, tampoco el taekwondo y la gimnasia menos, porque se esperaba que Jossimar Calvo fuera diploma en paralelas o barra fija, estuvo en la final de la general individual y quedó de décimo.
Después de Brasil y Cuba, Colombia es el mejor país del área, y superó a Argentina, México y Venezuela en la tabla de metales con los 3 oros, dos platas y tres bronces, con solo 147 atletas, menos que sus contrincantes.
Este ciclo olímpico de Colombia ha dado bueno resultados, ha sido casi que perfecto. Por primera vez se ganaron los Juegos Bolivarianos con un botín de 166 oros, en los Juegos Suramericanos e ocupó la segunda casilla detrás de Brasil, en los Centroamericanos y del Caribe fue tercera, escoltando a Cuba, campeón, y a México, mientras que en los Panamericanos de Toronto fue quinta, a 11 oros de Cuba y a 17 de Brasil y ganándole a México, Argentina y a Venezuela.
Tokio será la próxima estación, el cierre de otro ciclo olímpico en 2020, y allí el listón estará mucho más alto, por lo que se necesita mucha más inversión en la preparación de los atletas y un programa bien delineado para que en Japón la historia siga enriqueciéndose.
tomado de www.eltiempo.com
Published by: Editores Salsa y goles