La versión 2019 de Novak Djokovic parece simplemente imbatible.
Esa es la conclusión a la que llegó el mundo del tenis tras ser testigo de la imponente exhibición del número 1 del mundo en la final del Abierto de Australia.
El tenista serbio no solo ganó 6-3, 6-2, 6-3 en dos horas y cuatro minutos, sino que barrió en todos los aspectos del juego al español Rafael Nadal, quien no había perdido un set en todo el torneo.
Los comentaristas que transmitieron el partido para las diferentes cadenas oficiales, leyendas de la raqueta en su mayoría, se volcaron en elogios para el juego mostrado por Djokovic, llegando a asegurar que se trataba de un “nuevo nivel de tenis” y que era “una actuación que daba miedo”.
Fue el séptimo título en Australia para el tenista serbio, récord del torneo, y el 15º Grand Slam de su carrera, dejando atrás al estadounidense Pete Sampras en la lista de todos los tiempos.
Tomado de bbc mundo