El juego terminó después de 11 entradas. El equipo de Urueta quedó cerca de la eliminación.
Colombia pudo haber dejado este domingo en el campo al campeón defensor y favorito, República Dominicana, pero una discutida jugada en el plato se lo impidió y el equipo isleño al final ganó 10-3, en 11 entradas, en Miami (Estados Unidos), en el cierre del grupo C para los dos países en el Clásico Mundial de Béisbol.
Con la pizarra igualada a tres, en la parte baja del noveno y hombres en primera y tercera con un out, Reynaldo Rodríguez bateó un globo al jardín, en pise y corre desde la antesala corrió el emergente Óscar Mercado. La estrella dominicana José Bautista tiró al plato y el receptor, Welington Castillo, bloqueando –sin recibir la bola– la línea del corredor y aparentemente solo tocando con el cuerpo a Mercado, sacó el out, en decisión protestada por Colombia, que ahí perdió por expulsión a sus jardineros y hombres claves Rodríguez y Tito Polo.
Esa carrera le daba a Colombia el triunfo 4-3 y la clasificación a la segunda fase que se disputará desde este lunes en San Diego, a la que accedieron Dominicana y Estados Unidos, que derrotó 8-0 anoche a Canadá.
Si había triple empate con marca de 2-1, Colombia pasaba directo por tener la menor cantidad de carreras permitidas, y Dominicana y EE. UU. debían enfrentarse este lunes en duelo por el otro cupo.
Pero con la decisión del out, el partido tuvo entradas extras, y en la undécima, cuando aplicó la norma de poner corredores en primera y segunda bases, Dominicana aprovechó su mejor bateo para anotar siete veces frente a los relevos colombianos, perdiendo William Cuevas.
Colombia, que logró cupo directamente al Clásico Mundial 2021 al ocupar el tercer lugar en el llamado ‘grupo de la muerte’ (el sábado venció a Canadá 4-1, tras perder el viernes 4-3 ante Estados Unidos en 10 entradas), estuvo siempre abajo en el juego: 0-1, 1-3 y 2-3. Pero en la octava igualó a tres con jonrón solitario del receptor sincelejano Jorge Alfaro.
Dominicana, el campeón defensor y gran favorito, se estremeció ante la reacción y juego del equipo colombiano, que apenas cuenta con dos grandes ligas fijos (los lanzadores José Quintana y Julio Teherán, que se lucieron en los dos primeros juegos como abridores), contra ellos, que cuentan con estrellas hasta para dejar fuera del seleccionado. Y en el undécimo episodio sacaron su ‘carro de leña’ para castigar a la parte más débil que tenía la novena nacional: sus relevos.
Colombia, debutante en la cuarta edición del torneo que reúne a las 16 mejores del mundo, tuvo un equipo competitivo, dirigido por Luis Felipe Urueta, coordinador de las ligas menores de Arizona, y con el legendario Édgar Rentería en calidad de mánager general.
tomado de www.eltiempo.com