Lo eliminó en Argentina-2011 y la complicó mucho en Chile-2015, cuando le sacó un empate sin goles.
Si hay un equipo complicado en los últimos tiempos para la Selección Colombia es Perú. El equipo que dirige Ricardo Gareca será el rival de la escuadra de Pékerman el próximo viernes, en Nueva Jersey.
Los últimos antecedentes con los peruanos en la Copa América no han sido auspiciosos. En Argentina 2011, Colombia tuvo que llegar al tiempo extra para tratar de definir el juego a su favor, pero lo que terminó encontrando fue una derrota 2-0, en Córdoba. Y el año pasado, en Chile, fue empate sin goles, en un juego que dejó a Colombia dependiendo de un resultado ajeno para avanzar a cuartos de final. Se le dio: Brasil derrotó 2-1 a Venezuela y le dio la clasificación.
Gareca viene haciendo un buen trabajo con Perú. En la eliminatoria, Colombia lo derrotó 2-0 en Barranquilla, en un partido que Edwin Cardona terminó definiendo en tiempo de reposición luego de sufrir muchísimo. Pékerman les dijo a varios jugadores peruanos ese día: “Confíen en Gareca, que él los va a llevar al Mundial”.
Gareca ha reforzado bien el trabajo defensivo de la selección peruana. Pedro Gallese es el arquero y delante de él arma una línea de cuatro zagueros (Aldo Corzo, Cristian Ramos, el veteranísimo Alberto Rodríguez y Miguel Trauco). Delante de ellos pone dos volantes de recuperación, Adán Balbín y Óscar Vílchez.
Gareca ha hecho una renovación del equipo, especialmente en el ataque. Para esta Copa no convocó a los veteranos Jefferson Farfán y Claudio Pizarro. Pero sí se mantiene Paolo Guerrero, respaldado por el talentoso Cristian Cueva, jugador recién llegado a São Paulo, procedente del Toluca de México, que ya no juega por una banda, como lo enfrentó Colombia en la Copa América pasada, sino por el centro. Tiene el respaldo por las bandas de Édison Flores y de Andy Polo; este último, el mismo que jugó hace un par de años en Millonarios, pero que ya no juega como hombre en punta sino como un alero por la banda derecha, incluso con responsabilidad de marca para armar línea de cuatro cuando su equipo no tiene la pelota.
Invicto, con cuatro goles anotados y apenas dos recibidos, el equipo peruano logró una polémica clasificación, tras vencer a Brasil con un gol de Raúl Ruidíaz con la mano. Pero eso no le quita méritos al trabajo de Gareca, que ha fortalecido a los peruanos y quien los vuelve a poner en camino de las semifinales, como en las dos últimas ediciones.
tomado de www.eltiempo.com